Becky Prosser, que actualmente cuenta con 7 años nació con una pequeña mancha roja en la frente, que pronto se extendió en toda la cara, amenazando su visión
Los médicos le diagnosticaron hemangioma, una acumulación anormal de vasos sanguíneos en la piel.
Los padres la llevaron a una clínica especialista en láser, el Bedford Hospital, donde para los expertos era el peor caso que habían visto.
La pusieron un tratamiento de esteroides por vía intravenosa que salvó la visión.
A los pocos dias la realizaron la primera de las cinco operaciones de laser que se alargaron hasta los 18 meses de tratamiento.
En la actualidad la cara de Becky tiene una ligera decoloración de piel y lleva gafas para corregir la visión del ojo izquierdo.
Sus padres quieren dar a conocer el caso para que otras familias en situación similar sepan que "hay luz al final del túnel"
Fuente: Dailymail
Los médicos le diagnosticaron hemangioma, una acumulación anormal de vasos sanguíneos en la piel.
Los padres la llevaron a una clínica especialista en láser, el Bedford Hospital, donde para los expertos era el peor caso que habían visto.
La pusieron un tratamiento de esteroides por vía intravenosa que salvó la visión.
A los pocos dias la realizaron la primera de las cinco operaciones de laser que se alargaron hasta los 18 meses de tratamiento.
En la actualidad la cara de Becky tiene una ligera decoloración de piel y lleva gafas para corregir la visión del ojo izquierdo.
Sus padres quieren dar a conocer el caso para que otras familias en situación similar sepan que "hay luz al final del túnel"
Fuente: Dailymail
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