Cremas de protección solar, ¿como funcionan?

Acabo de descubrir este estupendo blog de ciencia de Lorenzo, licenciado en ciencias químicas y no he podido evitar la tentación de colocar alguno de sus artículos en este blog.

Así que paso a incluir este interesante articulo de cremas solares:

Ahora que está cerca el veranito, en algunas partes del mundo, hablemos un poco de las cremas solares que nos protegen de las radiaciones nocivas de nuestro astro rey. Intentemos conocer algo más de ellas que, incluso, nos puede ayudar a ahorrar algo de dinero.

Antes, voy a comentar la causa de la quemaduras de piel que todo el mundo seguro que conoce: el Sol está continuamente emitiendo energía y todo tipo de radiaciones, desde los rayos X hasta las ondas de radio. Estas dos radiaciones no nos preocupan ya que los rayos X son filtrados por la atmósfera y las ondas de radio son inofensivas. Otro tipo de radiación es la luz visible, y dos invisibles para nuestros ojos: la infrarroja (IR) que nos calienta pero no nos quema y la ultravioleta (UV) que es la nociva. Los UV se dividen en tres regiones según su energía: A, B y C. La radiación C la absorbe la capa de ozono así que una menos. Tenemos que preocuparnos de las otras dos.

Los protectores solares contienen una serie de compuestos químicos de difícil pronunciación, que son capaces de absorber estas radiaciones ultravioleta como son el avobenzone o el Parsol, que absorben rayos UVA, o octil metoxicinamato, omosalato, octil salicilato y padimate que absorben UVB. Además, también suelen llevar fórmula hidratante con vitaminas como la A, E y B5. En las cremas protectoras se pueden observar una serie de números que indican el factor de protección solar o en inglés Sun Protection Factor. Se simplifican con las siglas SPF. Los números SPF son factores de protección solar, es decir, los números nos indican cuanto tiempo puede estar al sol antes de que su piel se ponga roja, un síntoma que los médicos llaman eritema. Con un SPF15 en su piel, puede estar al sol 15 veces más tiempo que sin protección solar. Con un SPF30 puede estar al sol 30 veces más tiempo que sin protección. Eso es el doble de tiempo que con un SPF15. Pero lo curioso es que una crema con SPF30 protege sólo un 3% más de las radiaciones dañinas que un SPF15.

Expliquémoslo con un ejemplo:Imaginemos que una crema protectora 1 reduce a la mitad (50%) los rayos UV que producen quemaduras. Por lo tanto, podrías estar el doble de tiempo de lo normal sin quemarse. Si usted se quema en una hora podría estar durante dos. En este caso el SPF es 2.Imaginemos ahora que otra crema protectora 2 reduce el 75 % de los rayos UV, lo que significa que estaría expuesto sólo al 25% de los rayos que queman en lugar de al 100%. Sería capaz de estar al sol cuatro veces más que sin protección. En este caso el SPF es 4. La crema 2 reduce sólo un 25% más de rayos UV que la crema 1, pero su SPF es el doble. Para calcular el porcentaje de absorción a partir del SPF podemos utilizar la siguiente fórmula matemática:

(SPF – 1)100/SPF

Para un SPF de 20 –> (20-1)100/20 = 95% de absorción.Uno de 15 absorbe el 93.3% y el de 20 absorbe el 95%, sólo un 1.7% más.Pagando más dinero por un producto de más SPF sólo esta aumentando un poco la protección solar. Seguramente no merezca la pena. Si usted tarda una hora en quemarse y se pone una crema de SPF 15 podrá estar 15 horas bajo el sol sin quemarse. No creo que sea necesaria tanta protección. Seguramente, con una crema de menos SPF la protección será igualmente efectiva y se ahorrará algo de dinero.